La llegada de un nuevo miembro a la familia siempre es cogida con satisfacción por los padres, pero si ya hay un niño en la familia, la situación se puede tornar en celos entre hermanos, una rivalidad que puede requerir en episodios más extremos de ayuda psicológica en Torrelavega, puesto que puede conducir a ansiedad, depresión y baja autoestima, tanto en el futuro más próximo como a largo plazo.
En el Centro Psicología Hermes siempre recomendamos cortar de raíz en los inicios esta situación que puede ser más grave de lo que en principio puede parecer. Y ahí los padres juegan un papel muy importante, cuya tarea no será resolver los conflictos, sino mediar entre los hermanos, establecer reglas de convivencia en el hogar y, sobre todo, evitar en la medida de lo posible que surjan los celos.
La principal razón por la que surgen los celos es por el miedo del hermano mayor a perder el cariño y la atención de sus padres, una situación hasta cierto punto normal cuando llega un bebé, que requiere de atención a todas horas. El hermano mayor se ve destronado de esa posición de privilegio y ve al hermano como un competidor, aunque también se puede dar la situación contraria o incluso que sean recíprocos.
La ayuda psicológica en Torrelavega para tratar estas situaciones irá encaminada, sobre todo si ya están instaurados los celos, momento en que se nos solicita la ayuda, a enseñar a los padres a actuar. Lo primero es normalizar la situación, pero no regañar a los niños por ello, nunca comparar sus actuaciones o logros, porque eso añadirá competitividad nada sana a la situación, establecer reglas de convivencia y tratar de igualar el tiempo y cariño que se dispensa a ambos niños.